La adicción de los KPI nos obliga a tener que entenderlos, en este articulo desglosaremos el ADN de los KPI para poder saber cuales necesitamos y cuantos.
En la empresa moderna es habitual encontrarnos con profesionales que tratan de medirlo todo, sin embargo, en la mayoría de veces no se toma en en consideración la madurez del proceso, la cantidad de datos y la calidad de los mismos y sobre todo el recurso con el que contamos ya que alguien tiene que hacer todo el trabajo (recopilar data, procesarla, medirla, reportarla e interpretarla).
No es la intención de este articulo describir el universo de KPI que existen, sino más bien, ayudar a entender los tipos de KPI que existen y sus combinaciones para poder determinar cuál de todos necesitamos y si estamos preparados para implementarlos. Desglosemos el ADN de los KPI.
Contenido
¿COMO ENTENDER UN KPI?
Unidad
Todos los KPI deberían de tener unidad de medida: (usd/mes), (km/hora), (hora-hombre), kilos, etc.
La NASA ya tuvo un problema grave por no tener claridad en las unidades en las que trabajo.
Clase
La clase nos ayuda a entender si el indicador requiere de otros indicadores para su calculo.
- No deriva de ninguno otro, por ejemplo, las ventas.
- No primario. Se deriva de otros indicadores, por ejemplo la utilidad ya que se deriva de la suma o resta algebraica de ingresos, gastos, costos, etc.
Tipo
Son los más usados en contabilidad (aunque tienen mil usos en distintas áreas).
- Un KPI de stock es una foto actual del momento, por ejemplo, cuanto he vendido en el mes.
- Es un KPI Acumulativo, por ejemplo, la suma de las ventas de este mes más las de todos los meses anteriores.
Comparadores
Sirve para poner contexto al indicador, un indicador se puede comparar contra:
- Un objetivo. (Meta de ventas)
- El periodo anterior
- Conjunto (por ejemplo, una región contra otra)
- Pares (contra otros vendedores)
- Segmento (por ejemplo, contra otras empresas del segmento financiero)
- Mercado (contra todo el universo de empresas)
- Competencia (otras empresas similares)
Valor
Es el hecho, es el valor (número). Y se suele comparar contra otros KPI. El valor tiene una historia.
- Historia
- Nuevo mínimo. La primera vez en alcanzar un valor mínimo.
- Nuevo máximo. La primera vez en alcanzar un valor máximo.
- El clásico promedio.
- Subidas o bajadas consecutivas
- Primera bajada o subida (primera vez que cumple o no cumple el objetivo)
Dimensiones
Las dimensiones son “ángulos” de ver lo mismo. Por ejemplo, podemos tener las ventas de una empresa en una región, pero podemos adecuarlas en las siguientes dimensiones:
- Venta por país
- Venta por año, mes, día
- Venta por servicio, etc.
- Venta por tipo de cliente
Es habitual usar cubos para graficarlos y entenderlos mejor.
Gestión
Son indicadores que buscamos minimizar o maximizar.
- Mínimo (por ejemplo, tasas de interés en un préstamo, tasas de abandono, etc.)
- Máximo (por ejemplo, las ventas, tasa de adquisición de clientes, LTV, etc.)
Taxonomía
A través de qué datos se construye o calcula el número. Cual es numerador, cual es el denominador o que multiplica a que, etc.
Algunas recomendaciones finales:
- Homologuen el indicador. No todos interpretan lo mismo. La definición conceptual debe ser minuciosa.
- Cuidado con la proliferación de indicadores. Se estima que una persona solo puede prestar atención (buena atención) a un máximo de 5 números para tomar buenas decisiones.
- Cuidado con la trampa del denominador. Para subir un numero que se obtiene de dividir hay varias formas:
- Subir el numerador y mantener el denominador (es lo que se quiere)
- Mantener el numerador y bajar el denominador (te refleja un número que puede ser engañoso).
- Prestar atención a los indicadores opuestos, son buenos y hasta necesarios, pero deben ser regulados. Por ejemplo, aumentar ventas suele ir en contra de bajar los costos de una empresa.
- El articulo el ADN de los KPI es solo una manera de entenderlos. Hay muchas formas más.
La gestión de indicadores es esencial para la toma de decisiones informadas en una empresa. Implementa la norma ISO 9001 y acelera y mejora tus decisiones.
Por: Manuel De la Colina