La adecuada implementación y mantenimiento de los Sistemas de Gestión de Seguridad y Salud Ocupacional en las empresas siempre ha estado íntimamente relacionada con la gestión de los Recursos Humanos. En muchos casos, esta ha sido la encargada de asumir la responsabilidad de implementar un sistema de gestión de SSO
Teniendo que adaptar su estructura organizativa y viendo la necesidad de incorporar profesionales expertos en la materia. Caso contrario, los líderes del área de Recursos Humanos han sido los llamados a conducir el proyecto de implementación del sistema de gestión. Esto, de la mano e una firma de consultores, quienes cumplen el rol de expertos y permiten incorporar un sistema eficaz de SSO, en cumplimiento con la normativa vigente.
En empresas cuyo rubro de operaciones resulta ser de alto riesgo, como por ejemplo las grandes mineras o empresas de construcción el área de Seguridad y Salud Ocupacional. Han ocupado un lugar propio dentro del organigrama, lejos de la dependencia de Recursos Humanos.
Cual sea el caso, la relación entre el sistema de gestión de SSO y el área de Recursos Humanos cobra hoy en día una importancia mucho mayor. Si vemos la coyuntura actual en el Perú, la mayoría de las empresas formales ya cuentan con un sistema de gestión de SSO implementado y en proceso de maduración. Algunas empresas, especialmente las Pymes y empresas semiformales, ya se encuentran en proceso de implementación del mismo. Con la reciente contratación de auditores en la SUNAFIL, se ha incrementado la capacidad de cobertura de las auditorías. Las empresas toman cada vez más conciencia de la importancia de invertir en la implementación de este sistema.
Estamos frente a una nueva etapa en la gestión de la seguridad y salud de los trabajadores, ya no es suficiente implementar el sistema de gestión y olvidarse del asunto. Ya no basta con decir que contamos con un área, procesos, matrices IPER y UPS. No basta con estar listos “para la foto” de la SUNAFIL. Es momento de generar una cultura de seguridad y salud en nuestras empresas.
Para ello, la sinergia con el área de Recursos Humanos es clave. Recordemos que esta área es la responsable de velar por la difusión e internalización de la cultura organizacional en todos los colaboradores de la empresa. De esta manera se desarrolla un sentido de identidad en el colaborador para con la misma. Esto influye positivamente en satisfacer la necesidad de pertenencia, un factor que los psicólogos han estudiado como una de las principales fuentes de motivación de las personas. Al sentirse identificados con la empresa, los colaboradores empiezan a internalizar todos los componentes de la cultura, tanto los explícitos como la visión. La misión y los valores que han sido definidos por la alta gerencia. Así como los tácitos que refieren a las costumbres compartidas, los niveles de formalidad y jerarquía que dictan la manera en que los colaboradores se interrelacionan, etc.
Es dentro de este marco que el Sistema de Gestión de Seguridad y Salud Ocupacional debe encontrar un espacio para su difusión y promoción interna. La seguridad y salud de las personas debe ser mencionado explícitamente en la declaración de la Cultura Organizacional. Esto como la preocupación por la búsqueda constante del bienestar integral del colaborador. A su vez un llamado a la prevención, que es la manera proactiva de evitar accidentes laborales y enfermedades ocupacionales.
La internalización de estos conceptos conducirá a nuevos elementos tácitos de cultura que los colaboradores empezarán a compartir. Estos se verán en comportamientos concretos alineados con el cumplimiento de los lineamientos del sistema de gestión de SSO. También aquellos relacionados con la prevención de accidentes y enfermedades ocupacionales. Es así como se alcanzará un nivel de madurez ideal del sistema de gestión de SSO. Los colaboradores de la empresa conocerán los lineamientos y le otorgarán un alto nivel de importancia, no por el castigo sino por motivación intrínseca.
Tal y como comprenden y se comportan a la par con los valores de la empresa. Los colaboradores comprenderán la importancia de vivir una cultura de seguridad, que es parte de la cultura organizacional. Esto con el tiempo demostrarán más comportamientos alineados a esta.